NI UNA FRUTA, NI UN AVE SILVESTRE. UN GRAN RETO
Tehani María Ortiz
Porras
Que interesante este recuento sobre los
acontecimientos en la Guayana nuestra. Siempre
he pensado que José Antonio Páez ha sido el presidente más nefasto para la
nación, venezolana. Con él comenzaron los desmanes de forma descarada en el
país. Primero se hizo dueño de casi todo las tierras del país y para ello busco
la complicidad de sus amigos y
aliados para hacer lo mismo. Según este
excelente artículo, hasta 1834 la situación estaba bien clara acerca de la soberanía de Venezuela sobre el territorio
en cuestión, estableciendo los mismos límites que la Capitanía General de
Venezuela había adjudicado para ese territorio.
Fue el Apátrida Páez quien en este mismo
año (1834) comienza hacer acuerdos de colaboración
(coqueteos políticos) con los ingleses…. Porque? Y permite que
el Gobierno Británico envíe al explorador alemán Herman Schomburgk para
colocar, arbitrariamente, hitos de demarcación en la selva como también en Punta
Barima y hasta en la Boca del Orinoco por su ubicación estratégica. Posteriormente en 1840, durante su gobierno, en
Londres se publica un mapa que muestra la
línea demarcada por el explorador alemán Herman Schomburgk por el extremo
Norte-Sur, como máxima reclamación británica. A partir del cual surgirá el
conflicto limítrofe de demarcación limítrofe con la Guyana Británica. La nueva delimitación en el papel llega a
141.930 kilómetros cuadrados.
Pienso
que esa permisividad da origen al conflicto en sí y que todas las gestiones
posteriores a esta situación no se han llevado con la debida celeridad y
firmeza que ameritaba una decisión contundente y positiva para Venezuela.
Han
pasado muchos años, se han roto los convenios, se establecieron en nuestro
territorio comunidades culturalmente extrañas a lo nuestro. Esas comunidades se
han fortalecido con el tiempo al calor
de la protección de otros gobiernos que nos han colonizado indirectamente para espolear
nuestros recursos.
Perdimos
el tiempo propicio, cuando debimos haber tomado posición de lo nuestro, hace
cien años atrás. Faltó compromiso patrio, por parte de todos los presidentes posteriores a Páez también,
por lo tanto no podemos endosarle toda la desgracia a ese nefasto personaje. No
se crearon políticas de estado que
favorecieran la emigración de venezolanos hacia esos territorios, no se crearon
comunidades venezolanas en la zona, no sé crearon los transportes fluviales por
nuestros ríos, para determinar la soberanía, no se crearon Leyes que regularan
la explotación de nuestros recursos, nuestras Fuerzas Armadas no tienen ni un
solo fuerte permanente en la región, todo lo cual se debió establecer, cuando
ese territorio estaba prácticamente virgen.
¿Quien podía impedirnos entonces asentarnos en
lo nuestro? Cuando teníamos las pruebas en las manos! Paso el tiempo y la
diplomacia de boca permitió en su letargo
que, esos espacios, fueran
ocupados por extraños a quienes solo los impulsa el sueño de ser ricos. Venezolanos unos
pocos y extraños muchos, todos
garimpeiros que, al lograr salir de las minas terminan contaminados, terriblemente enfermos y lo que se llevan escasamente les alcanza
para pagar por recuperar la salud y juventud que entregaron al sueño dorado,
para terminar siendo más pobres que antes de dedicarse al diabólico negocio.
Hoy
tarde ya, tenemos un territorio
desbastado, por grandes empresas que,
explotan a esa población inconsciente y
ambiciosa para poder enriquecerse TODOS,
solo por un tiempo. Generalmente
ellos también son víctimas de asesinatos por parte de los maltratados
oprimidos, quienes tienen que tragarse una piedra de regular tamaño para luego
buscarla en sus excrementos con el fin de lucrarse en algo por su trabajo.
Recuerdo yo, las historias de una joven campesina que por allá en los años
1987- 88 cuando no tenía efectivo para pagar a sus obreros, se iba hasta Santa
Elena de Guiaren, con su camioneta full de artículos de primera necesidad:
jabón de olor, champú, papel higiénico, toallas sanitarias, pasta dental,
plaguicidas, pan de leche, casabe, regañonas, gasolina, gasoil, pero sobretodo muchas
carteritas de ron, cigarros, tabacos y
condones. También ella explotaba las necesidades de esos garimpeiros.
Estamos ante un problema donde el compromisos
ya no admiten la diplomacia internacional tradicional. La Guayana Esequiba es
nuestra y quizás en ese territorio esté la garantía de nuestra subsistencia.
Las negociaciones con determinación, ajustadas a nuestra Constitución de la República Bolivariana de
Venezuela nos obligan a respetar los
derechos de todo ser humano, venezolano o extranjero y eso hace la cosa más difícil.
En socialismo estamos obligados a ser
humanistas. Solo conquistar a ese pueblo en buena
lid, despertarles la consciencia de que son venezolanos por
nacimiento y aceptarlos como nuestros en
su diversidad cultural pudiera ser el paso a una solución pacífica. Descolonizarlos,
gestarles la independencia y
convivir con ellos como hermanos pudiera
en el tiempo convertirlos en nuestros aliados.
No quisiera yo tener que escribir y aceptar,
que tantos años de indiferencia antes
una situación como la que nos
toca enfrentar, le da derechos al que se ha establecido por las buenas o por
las malas en ese lugar, que al parecer no tenía dueño y si lo tenía, no tuvo
los suficientes cojones para posesionarse sobre lo que es suyo. Si la Guayana era importante por sus riquezas,
siempre lo fue. ¡¿Porque no la cuidamos desde entonces? Con determinación,
guerreándola. El Dr. José María Vargas
siempre alerto a los gobiernos de
su época sobre las riquezas del subsuelo
venezolanos y el compromiso que teníamos de cuidarlos. Mucho antes de que se
fundara La Petrolia, escribió documentos en este sentido.
Solo un milagro, el espíritu de Chávez que nos
acompaña cada día en estas luchas de la revolución bolivariana, la sapiencia de
esa joven y hermosa Canciller que
lujosamente ostentamos, pueden dar una solución pacífica a este problema de
grandes proporciones que se nos viene en un momento en que, el país confronta
situaciones difíciles de toda índole.
Pero como Chávez nos enseñó: fortaleza, resistencia y más resistencia, nervios de acero, unidad en las adversidades,
con un pueblo crecido en la defensa integral de la nación seremos, victoriosos.
Conquistaremos entonces, una nueva Victoria Popular, revolucionaria y bolivariana.
Defender la patria es un compromiso de todo venezolano y solo nos resta apoyar
al Presidente Maduro en esta nueva embestida.
Nota del
Tutor:
Excelente trabajo de análisis
y síntesis del tema.
Metodológicamente impecable: INFORMACION-REFLEXION Y
ACCION.
Este tema será
de máxima prioridad por
lo menos para los próximos
05
años. Es posible que todo
esto provoque un enfrentamiento armado donde
nos involucraremos para defender
lo nuestro.
Inglaterra y EE.UU.
harán todo lo posible
para provocar un
conflicto entre las
dos naciones. Estemos
alertas y conozcamos
a fondo sobre
este tema. Estamos
llamados a ser
los que orientemos
e informemos a nuestro
pueblo, es nuestro destino como
facilitadores de formación socialista.
16/06/2015
Antecedentes[editar]
Guyana, oficialmente Co-operative Republic of Guyana, estableció la inclusión del Territorio Esequibo dentro de sus límites en la Constitución de 1980, reformada en 1996, que sostiene que:
"El territorio del Estado abarca las áreas que inmediatamente después del comienzo de esta Constitución fueron comprometidas en el área de Guyana junto con otras áreas que pudieren ser declaradas como parte del territorio del Estado por Ley del Parlamento."n 1
Estas áreas son las que conformaban la colonia de la Guayana Británica, antes de su independencia, para la cual la Gran Bretaña reconoció como límite occidente al río Esequibo, cartografiado políticamente a su favor en 1938.
Por su parte, Venezuela incluye el territorio dentro de sus dominios desde su primera constitución de 1811, cuya última reforma fue dada en 1999, declarando en el artículo 10 que:
"El territorio y demás espacios geográficos de la República son los que correspondían a la Capitanía General de Venezuelaantes de la transformación política iniciada el 19 de abril de 1810, con las modificaciones resultantes de los tratados y laudos arbitrales no viciados de nulidad."
La Capitanía General de Venezuela incluía los territorios de la antigua Provincia de Guayana, que ocupaban la misma región Esequiba.
Tras haberse apelado al gobierno de Estados Unidos, éste propuso un arbitraje; se formó un tribunal en el año de 1899, cuya decisión forma el Laudo Arbitral de París. El tratado concluyó con la cesión del territorio al oeste del río Esequibo aGran Bretaña. Sin embargo, siendo que Venezuela no estuvo representada directamente, ya que los dos representantes de Venezuela fueron nombrados por los Estados Unidos no representando al Estado venezolano, ésta declaró la nulidad del tratado décadas después, alegando además importantes vicios que invalidan la decisión arbitral.
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